Carolina Mancuso: “Mi sueño es tener un proyecto de intercambio

Por Melina Sólimo Siempre supo que quería bailar. Recuerda como si fuera hoy el día en que, junto a su mamá, vio «La Fille Mal Gardée» en el Teatro Colón. En ese instante, soñó con “ser parte de ese cuento” de ballet que transcurría en el escenario. Comenzó sus estudios e ingresó al Instituto Superior […]

miércoles, 28 de agosto de 2013 |

Por Melina Sólimo

Siempre supo que quería bailar. Recuerda como si fuera hoy el día en que, junto a su mamá, vio «La Fille Mal Gardée» en el Teatro Colón. En ese instante, soñó con “ser parte de ese cuento” de ballet que transcurría en el escenario.

Comenzó sus estudios e ingresó al Instituto Superior de Arte del Teatro Colón, estudió con Katty Gallo y Raúl Candal, e integró el proyecto del Ballet Sub-16 de Julio Bocca. Finalmente, consiguió una beca completa para estudiar en la Escuela de Hamburgo y, luego de su graduación, ingresó al elenco liderado por John Neumeier, donde permaneció durante cuatro años.

Hoy, luego de 4 años de trabajo en el Ballet de Hamburgo de John Neumeier, y 6 años de brillar en el Nederlands Dans Theater en Holanda (*), Carolina Mancuso bailará por primera vez como profesional en Argentina, en la 3º Gala de Ballet de Buenos Aires en el Teatro Coliseo, los días 29 y 30 de agosto, en un dúo de Joeri Dubbe junto a Pablo Fermani, integrante de la Compañía Nacional de Danza Contemporánea de Argentina.

Carolina, con su voz calma y amigable, nos contó sobre sus sueños, sus expectativas y su manera de ver y sentir la danza. En una charla tan extensa como interesante, la estrella nacional que brilló en el exterior, habló con REVOL sobre cómo se vive bailar en su tierra por primera vez.

R: ¿Cómo vive los ensayos y que expectativas tiene para las funciones?

C: Para mí es una maravilla y estoy muy emocionada de poder tener esta oportunidad, después de trece años que me fui. Estoy muy ansiosa, pero también muy tranquila, porque es algo que hace mucho tiempo que vengo ansiando.

Estoy disfrutándolo todos los días porque estoy yendo a trabajar en Argentina, sabiendo que va a ser para una gala muy importante, muy bien organizada, por eso agradezco a la productora Grupo ARS el trabajo impecable que están haciendo. Estoy trabajando desde principios de agosto y ya empecé a ensayar con Pablo Fermani. Estoy con mucha expectativa de ver cómo el público se siente después de las funciones y la reacción que habrá. Estoy muy ansiosa, no nerviosa, sino como con mariposas en la panza (risas).

R: ¿Cómo fue trabajar con Joeri Dubbe y con su partenaire, Pablo Fermani?

C: Trabajar con Joeri es muy divertido, es una persona muy sencilla con la que no te sentís incómodo, porque si algo no te sale o te está costando un poquito más, él es muy tranquilo al explicar las cosas. Además, lo que aprecio de trabajar con él es que se adapta a cada bailarín y a sus posibilidades, al cuerpo y altura de cada uno.

La chica para la que él hizo el dueto que voy a hacer en la gala tiene una contextura física similar a la mía, pero si el caso fuese otro, hay un montón de cosas que cambian. Algunos coreógrafos se empecinan en que se hagan cosas que pueden perjudicar al bailarín, se puede lastimar, no por la incapacidad física sino porque las estaturas y la fisionomía es otra. Por eso estoy muy contenta de trabajar con Joeri, es una persona muy humana, divertida y tranquila, el tiempo se pasa volando cuando estoy con él.

Pablo es un personaje, es una persona muy positiva, con muchas ganas de trabajar y tiene una energía muy activa, lo que hace que los ensayos sean muy fluidos. Mas allá de que es la primera vez que trabajamos juntos, estamos muy contentos no sólo de la oportunidad, sino también de cómo están saliendo las cosas.

R: ¿Cuál es la esencia de la pieza Trigger Happy, que vas a presentar en la Gala de Ballet?

C: La coreografía de Joeri Dubbe es un fragmento que fue estrenado en el Nederlands Dans Theatre 2, en enero del 2013. Es la segunda parte de una pieza de dura un total de treinta minutos y fue inspirada en la película «2001: Odisea en el espacio» de Stanley Kubrick (1968). Aunque es un fragmento, lo lindo es que tiene un principio y un fin, tiene una buena transición y hace que el público pueda tener distintas experiencias, sin sentirse descolocado.

La obra trata sobre las emociones y la mente, cómo la mente domina las emociones y cómo nuestras decisiones pueden repercutir en los siguientes pasos, cómo eso afecta a la sociedad y si en un futuro va a haber lugar para esas emociones o si la mente va a dominar todo. Joeri se cuestiona mucho estas cosas en la obra, inspirado en los cuestionamientos que plantea maravillosamente Stanley Kubrick en la película.

Carolina Mancuso, en "Prospect Future", la primera obra que bailó de/con Joeri Dubbe y con la que viajaron al China World Expo en Shanghai. Foto: Korzo producties © Robert Benschop

Carolina Mancuso, en «Prospect Future», la primera obra que bailó de/con Joeri Dubbe y con la que viajaron al China World Expo en Shanghai. Foto: Korzo producties © Robert Benschop

R: ¿Cómo y cuándo decidió que iba a dedicarse a la danza?

C: Empecé a bailar cuando tenía cinco años, era muy chiquita. Siempre estuve entre hacer natación o bailar o jugar a las Barbies (risas). Recuerdo bien el momento en que empecé a ir a ver espectáculos profesionales. El día que fui al Teatro Colón, sentí que estaba viendo un cuento pero en vivo, me emocioné y le dije a mi mamá: “Ahí es donde yo quiero estar”. Cuando sos chico no entendés las cosas que tenés que hacer para llegar a donde deseas, el camino fue largo, muy arduo, de mucho trabajo, pero muy satisfactorio también, si pienso desde ese día hasta hoy.

R: ¿Cómo vive una argentina el hecho de comenzar su carrera profesional en el exterior? ¿No anhelaba volver?

C: Lo raro es que todos mis conocimientos y también mi desarrollo como mujer y como persona fueron afuera de la Argentina. Es muy raro, porque yo cuando vengo acá, estoy como una extranjera o turista buscando lo que más me gusta, no sólo para crecer en lo profesional y el día de mañana establecer una relación laboral, sino también como público, para pasar un buen momento viendo un espectáculo.

Nunca pensé en hacer la carrera acá, porque me siento muy privilegiada de todas las experiencias que tuve y todo lo que viví hasta hoy, dentro de las infraestructuras que se me fueron presentando. Quizás acá hay que tener otro tipo de empuje y de trabajo, más contactos, creo que es más difícil por la inestabilidad económica del país. Pero si me enfoco en la parte familiar, ese es un peso muy grande en mi corazón, que a veces hace que me sea muy difícil estar allá.

Por suerte, como digo siempre, tenemos una herramienta maravillosa que es internet, que me permite aclarar mis dudas sobre la Argentina y enterarme de todo lo que pasa. Dentro de todo, me siento bastante conectada. Estoy muy contenta, porque siento que no es coincidencia, algo quiso que mi primer proyecto free lance sea en la Argentina, que es algo que quiero hace tanto tiempo.

R: ¿Cómo lleva adelante la metodología “freelance”? ¿Qué la llevo a tomar esa decisión?

C: Yo desde agosto no estoy trabajando más en la compañía. Es una decisión que venía amasando pero me faltaba dar el paso. Después de diez años de estar en el NDT, con experiencias increíbles y muy ricas, hoy puedo darme el privilegio de ser más selectiva, elegir con quien trabajar y la duración. Como en cualquier institución, desde la compañía a veces se imponen los tiempos para trabajar con un coreógrafo que quizás tenés muchas ganas de trabajar y a veces son sólo tres semanas, mientras haces giras y bailas por las noches otras coreografías.

Estoy en un momento de mi vida en el que me gustaría hacer un zoom en un coreógrafo que me interese y a través de todos los conocimientos que fui adquiriendo a lo largo de estos años, me puedo dar el gusto de trabajar free lance y trabajar más en exclusivo con alguna gente. La motivación principal es tener el tiempo y el espacio para llevar algo a cabo, sin tener limitaciones.

R: ¿Cuándo fue que descubrió que la danza contemporánea era su manera de expresarse? ¿Qué fue lo que más le atrajo de ella?

C: Cuando estuve en el Ballet de Hamburgo, muchos de los bailarines hacían pequeñas presentaciones en concursos con sus propias coreografías y allí quizás fueron mis primeros contactos con lo contemporáneo. Pero fue en el NDT 2 que yo descubrí que esto era lo que más me gustaba, lo que hacía que yo pueda soltarme y respirar. La infraestructura que te puede otorgar en NDT 2, en la compañía juvenil, es que la edad varía mucho entre los bailarines y las experiencias también. Eso fue muy enriquecedor, ya que cada uno tiene una percepción distinta de lo que un coreógrafo te está mostrando y fue increíble porque me sirvió para observar a mis colegas y a su vez, a mí misma. Fue un gran aprendizaje y ese fue el momento en que yo me di cuenta que la danza contemporánea era lo mío, y me pregunté porque no había tomado esta decisión antes (risas).

La experiencia que tuve con Jirí Kylián y con Joeri Dubbe fue muy especial. Ambos tienen formas similares de trabajo. Con Jirí fue muy impactante, entramos a la sala… Yo ya había trabajado con él pero el clima era diferente. Llegó y dijo: “Hola que tal, soy Jirí”, y empezó a hablar de él, aunque nosotros ya sabíamos quién era. Estaba sentado en el piso, igual que nosotros, riéndose, también nervioso porque estaba por crear, lo sentís muy humano y en el mismo nivel. Eso hizo poner todas las inseguridades fuera de la sala, que es algo esencial para todos los coreógrafos pero no todos los logran. Entonces la creación fue como jugar, de lo que quizás uno ve como un error, un desbalance, él lo utiliza muchísimo. Así es como creamos hasta ahora.

Gracias a ellos me di cuenta que yo no era una chica sólo de repertorio, que además de aprender algo de un video o de un profesor que te la marque, que también es muy enriquecedor, también puedo crear algo de la nada, de una idea, de un boceto, que eso te inspire a otra cosa o que se ponga una música y según cómo te sentís o el partenaire que tenés, hace que crees vos junto con él. A veces el coreógrafo es el que guía y a veces el que crea, es de a dos la cosa. Sin uno no podría estar la otra parte y viceversa. Eso es lo que más disfruto de la danza contemporánea, me hace bien, me siento muy reflejada y completa.

La obra "Good and Dogs" de Jiri Kylian para el NDT2. Foto: Cortesia de Daisy Komen.

La obra «Good and Dogs» de Jiri Kylian para el NDT2. Foto: Cortesia de Daisy Komen.

R: ¿Cómo cree que seguirá su carrera? ¿Qué sueños le quedan por cumplir?

C: Mi carrera sigue exactamente donde estoy parada hoy. Empezar a elegir mis tiempos, sentirme bien como persona y no sólo como artista, las dos al nutrirse van a hacer que pueda seguir evolucionando. Me gustaría llegar a tener un proyecto de intercambio acá, ese es mi sueño, trabajar en Holanda con Joeri o con algún coreógrafo que me inspire y poder desarrollar una coreografía con bailarines de intercambio de Argentina o algún país de Latinoamérica.

Después me gustaría estrenarla en las ciudades donde se hizo el intercambio, eso sería ideal si fuese posible acá. Me encantaría enseñar por las mañanas, tengo necesidad de intercambiar todo lo que viví porque yo también voy a recibir, es de las dos partes. En Argentina es la primera vez que vivo el hecho de ir a una clase, y me gustaría poder seguir viviéndolo, generar más intercambios de conocimiento.

R: ¿Qué le diría a la nueva generación de bailarines que quiere triunfar o vivir de la danza?

C: Que se escuchen; si algo no se siente bien, que le presten atención. Que sean receptivos, que lo que te gusta sea lo que estés realizando. Y esto lo digo siempre en todas las entrevistas, hay que escuchar al cuerpo, es tu instrumento y no tu esclavo, es tu compañero, no te tiene que seguir, te está acompañando a todos lados. Es un trabajo de las dos partes, por eso digo que si algo no se siente bien, hay que escuchar.

También tienen que saber que el talento es importante, pero que es más importante lustrar los zapatos, siempre hay que trabajar. No importa que tengas todas las posibilidades presentadas, sino vos no estás trabajando, no vas a llegar a ningún lado. Cuando digo llegar es a donde cada uno quiere llegar, no importa llegar a grandes teatros o ser reconocido, lo más importantes es llegar a donde uno se ve feliz, sea en un lugar chiquito o grande. Pero siempre hay que trabajar a conciencia.

R: Teniendo en cuenta su experiencia europea, ¿Qué análisis puede hacer de la danza contemporánea en nuestro país? ¿Cómo la puede comparar con sus vivencias en Holanda?

C: Como no viví en Argentina, no conozco mucho de la danza contemporánea local, es importante aclararlo. Pero sobre lo poco que vi, me gustaría que no se enfoque tanto en el pasado, sino en lo que está por venir, desearía que se invierta más en los coreógrafos más pequeños, porque sino todo decae. Eso es algo que yo puedo observar en Holanda, donde sí hay posibilidad para que los coreógrafos realicen sus trabajos, aunque es un trabajo arduo, se puede hacer.

En cambio acá, la infraestructura quizás no lo permite mucho. Como espectador, como público, eso es lo que veo. Me gustaría ver que Argentina pueda evolucionar y sacar su propio sello dentro de la danza contemporánea y no se aferre a algo que paso hace veinte años atrás, aunque siga siendo valioso y respetable. Pero no hay que confundir lo contemporáneo con lo moderno, la danza contemporánea es del día de hoy, no de lo que ya sucedió, el pasado es importante para ir hacia el futuro, las dos son importantes, pero siempre se tiene que invertir hacia el futuro.

R: ¿Qué proyectos la esperan para el 2013-14?

C: Después de las funciones del 29 y 30 de agosto en el Teatro Coliseo, me vuelvo a Holanda, donde ensayo por dos semanas y viajo a Bilbao, España, para hacer una película danza-arte, de la coreógrafa Marina Mascarell. Estoy muy ansiosa, va a ser un proyecto muy interesante porque está inspirado en «El Libro de la Selva», con la crítica de cómo un hombre que nace en la jungla, se ve bajo el ámbito de la sociedad, luego de criarse rodeado de naturaleza. Va a filmarse en el bosque de Bilbao y vamos a terminar la filmación en un teatro de allá.

Después voy a participar de una creación completa con Joeri Dubbe, durante cuatro meses y medio. Primero vamos a tener la creación de un mes y medio, después el estreno, luego nos vamos a Rusia con otra obra completa. Finalmente voy a estrenar unos vestuarios de otra coreografía que Marina Mascarell va a crear para una compañía de Suecia. Estoy muy contenta.

R: ¿Qué es lo que más y lo que menos extraña de Argentina?

C: ¡Qué pregunta! Lo que más extraño es mi familia, los mates, la cara de dormidos de todos (risas). Lo que menos extraño, de Buenos Aires quizás, es que el argentino se destaca por sabérselo todo. Eso no lo extraño.

Para agendar:

Carolina Mancuso, primera bailarina y única argentina triunfante hace más de diez años en el Nederlands Dans Theater (NDT), actuará en la 3º Gala de Ballet de Buenos Aires en el Teatro Coliseo, los días 29 y 30 de agosto, en un dúo de Joeri Dubbe junto a Pablo Fermani, integrante de la Compañía Nacional de Danza Contemporánea de Argentina.

Será un fragmento de Trigger-Happy, inspirada en la película de Stanley Kubrick 2001 Odisea del Espacio, sobre música de Thijs Kaldenbach y Marvin van Boven, creado para el NDT2 (estrenado el 25 de enero de 2013) y que es una co-produccion con Korzo Producties y Nederland Dans Theater.

(*) Fe de erratas: En una publicación previa, en la nota figuraba que la artista había pasado diez años en el Nederlands Dans Theater de Holanda, cuando en realidad se trata de 4 años de trabajo en el Ballet de Hamburgo de John Neumeier, y 6 años en el Nederlands Dans Theater en Holanda, lo cual hacen a diez años en total de trabajo en grandes compañías. Pedimos disculpas por el error a nuestros lectores y agradecemos la corrección a la artista.

Producción REVISTA REVOL.

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