Festival de Cali: Otro éxito del Ballet Metropolitano de Buenos Aires

El BMBA fue una de las compañías más aplaudidas del festival, según la prensa local colombiana.

lunes, 16 de junio de 2014 | Por Maria José Lavandera

El Festival Internacional de Danza de Cali, en Colombia, concluyó el pasado 8 de junio –dio inicio el 1°-  y para el Ballet Metropolitano de Buenos Aires, en su primera presentación allí, fue más que un éxito, con actuaciones que se extendieron todos los días de duración del evento -fueron cinco en total-. “Después de la gira a Rusia [en 2012], artísticamente la participación en este festival fue lo más importante que realizó el Ballet Metropolitano. Fue una sorpresa por lo bien organizado que estaba. Las actuaciones fueron siempre en teatros hermosos, como el Teatro Municipal Enroque Buenaventura, el Teatro Jorge Isaacs, el auditorio de COOMEVA, Plaza de Toros Cañaveralejo -donde se hizo la apertura- el teatro al aire libre Los Cristales, donde se hicieron las dos últimas funciones con capacidad total para 14.000 personas. Una maravilla”, cuenta Juan Lavanga, gestor cultural de la compañía.

Compartieron escenario junto a algunas de las más prestigiosas compañías del mundo: la italiana Imperfect Dancers Company –dirigida por Walter Matteini e Ina Broeckx-, Bohemia Ballet –del Conservatorio de la Ciudad de Praga-, el Ballet Nacional Dominicano –de República Dominicana-, la compañía canadiense de Shay Kuebler –que indaga entre el hip hop y las artes marciales-, la compañía “Larreal” del Real Conservatorio Profesional de Danza “Mariemma”, de España, la Compañía de Danza Contemporánea de Cuba, además de los anfitriones, el Incolballet, el Ballet de Tulsa –de Estados Unidos-, el Alberta Ballet -de Canadá-, el Ballet Carmen Roche -de España-, Béjart Ballet Lausanne y el Ballet de Santiago de Chile.

También participaron caleños formados en Incolballet, radicados en distintas partes del mundo para un programa llamado «Reencuentro con Cali», del que formaron parte Fornier Ortíz, el coreógrafo Roberto Zamorano (Teatro San Carlos de Nápoles), Soraya Sánchez (profesora de danza en Holanda), Juan Carlos Peñuela (maestro en el Ballet Hispánico de Nueva York y en Joffrey School) y Juan Pablo Trujillo.

La obra "Tierra y Luna", de de la coreógrafa española María Rovira, con música del cantante cubano de hip hop X Alfonso. Foto: Prensa Festival de Cali.

La obra «Tierra y Luna», de de la coreógrafa española María Rovira, con música del cantante cubano de hip hop X Alfonso. Foto: Prensa Festival de Cali.

“Se llenaban con miles de personas porque todo lo que son auditorios eran con entrada libre y gratuita. El auditorio Los Cristales está en un parque hermosísimo – El Nacional-. Lo llamativo es la respuesta fervorosa de la gente: por ejemplo, el sábado 7 todas las compañías que actuábamos debíamos hacer un ballet completo. Actuaba el Bohemia Ballet, Ballet Nacional Dominicano, el Incolballet y el Metropolitano. Ese día, una hora antes de empezar la función, se largó una lluvia torrencial. La gente se cubría con unos nylons de la lluvia pero no se iba. Nadie se movió. A pesar del piso mojado y por respeto al público, cada compañía resolvió hacer 10 o 15 minutos de su obra. Fue una explosión. Y el día siguiente, con un día espléndido, el cierre se convirtió en una fiesta total. La obra de Reale, “Bastones Dorados”, que ya es un clásico nuestro, tuvo que repetir cuatro bises. Fue la compañía que recibió la mayor ovación, fue impresionante”, cuenta Juan, todavía con alegría y asombro.

Es así como lo cuenta también la crítica local “las mayores ovaciones fueron para el Ballet Metropolitano de Buenos Aires, de Argentina, con su pieza ‘Bastones Dorados’, que empezó con una melodía clásica y remató con un fox” (Diario El País, de Colombia). Ese mismo día, resalta Juan, que todos los directores de las compañías abrieron públicamente una carta para el alcalde de la ciudad, Rodrigo Guerrero, en apoyo al movimiento cultural de enorme magnitud que representa el festival para Latinoamérica, un espacio de encuentro, interacción y puesta en común para la comunidad internacional de la danza: “Tuvimos almuerzos de trabajo de todos los directores y gestores culturales que estuvimos presentes. También firmamos una nota en apoyo al festival para que se siga haciendo. Para ellos es muy duro llevarlo adelante. Tiene todo un aspecto social la obra de Gloria Castro –directora del festival y del Incolballet-, porque no es solamente la cuestión artística, sino que se tiene en vista la parte educacional. Todos los chicos y chicas hacen su escuela en el Incolballet, además de tener su formación artística. Hay chicos de escasos recursos que pueden acceder a esta educación, lo cual permite que muchos de ellos salgan de situaciones muy difíciles, una vida de situación de calle y desamparo. Todos están guiados por una meta artística y es obra de esta mujer, que ha expandido la danza en Colombia de un modo increíble y sin efectos de egoísmo personal o de divismo. Es una persona que trabaja netamente en esto”, asegura el director del Ballet Metropolitano.

Leonardo Reale y Nina Zaera en la obra de Margarita Fernández, "Un instante, dos caminos", con música de Marcos Pochi Fernández. Foto: Prensa Festival Internacional de Danza de Cali.

Leonardo Reale y Nina Zaera en la obra de Margarita Fernández, «Un instante, dos caminos», con música de Marcos Pochi Fernández. Foto: Prensa Festival Internacional de Danza de Cali.

La carta da cuenta de que ya el Festival es “un importante referente del mundo de la danza y particularmente en América Latina es uno de los pocos que se realiza con altísimo nivel de calidad y compromiso artístico”, agradece su apoyo e insta al reconocimiento constante de la tarea social y artística que la Maestra Gloria Castro lleva adelante a través del ballet, el festival y la escuela que lleva adelante.

“Una de las cosas más lindas que se dan en este festival es la fraternidad entre los grupos. Es así que una de las parejas que participarían tuvo un inconveniente y nos pidieron si podíamos ayudarlos a suplirla. Y una pareja nuestra bailó “A Buenos Aires”, de Gustavo Mollajoli”, comenta el productor.

Asimismo, en el marco de los eventos se llevaron a cabo conferencias de todo tipo, a cargo de grandes personalidades como Miguel Cabrera –historiador del Ballet Nacional de Cuba- o la italiana Elisa Guzzo Vaccarino, crítica y teórica de la danza y desde 2007 directora artístico de la escuela MAS PM Dance Lab de Milán, así como conversatorios de críticos de danza.

Y el final fue una fiesta popular, en la que la danza fue la excusa perfecta. “El desfile final en la Plaza de Toros Cañaveralejo estuvo a cargo del coreógrafo cubano Alberto Méndez, quien organizó la entrada de todas las compañías, con la música de la Mazurka del ballet de “La Bella Durmiente”, de Tchaikovsky. Fueron apareciendo todas las compañías hasta que hizo su entrada Gloria Castro, la directora del festival. Hubo fuegos artificiales y la gente era un delirio. Te digo que realmente –yo que fui a muchos festivales –este es una fiesta, la gente lo disfruta muchísimo. Es muy buena la calidad de las compañías invitadas y se sumó la presencia de los excelentes bailarines caleños que hay en distintas compañías del mundo”, concluye Juan, quien recuerda, además, que, tras su éxito, ya tienen en cartera otra cantidad de invitaciones.

La compañía en el Teatro Jorge Isaacs. Foto: Gentileza Juan Lavanga.

La compañía en el Teatro Jorge Isaacs. Foto: Gentileza Juan Lavanga.