Rotemberg «recargado»: «La Idea Fija» y «Las vírgenes» en carte

Y así, como quien no quiere la cosa, al coreógrafo Pablo Rotemberg no le quedó otra, parece ser. Y volvió para quedarse. Luego de una gira por Chile, volvió «La Idea Fija» al Portón de Sánchez (Sánchez de Bustamante 1034), todos los domingos a las 19. Sí, sí, TODOS. TODOS los domingos del año. Esta […]

viernes, 21 de junio de 2013 |

Y así, como quien no quiere la cosa, al coreógrafo Pablo Rotemberg no le quedó otra, parece ser. Y volvió para quedarse. Luego de una gira por Chile, volvió «La Idea Fija» al Portón de Sánchez (Sánchez de Bustamante 1034), todos los domingos a las 19. Sí, sí, TODOS. TODOS los domingos del año.

Esta obra controvertida, ecléctica, oscura –un relato desfragmentado sobre las antípodas del sexo y su versión ligada al sometimiento– ha llevado a la escena off de la danza contemporánea a mezclarse con los éxitos de taquilla. Sí, a mucha honra. Pablo Rotemberg pasó la raya y nos da, a los amantes de las obras experimentales, un gusto enorme. Le va bien. No bien, mejor. A sala llena y con gente esperando. Lo que se dice, en la jerga común, un éxito.

Entradas $70/$50

Les dejamos nuestra entrevista con él, en la que afirma: «El movimiento libera lo oculto»

"La idea fija". Ph: Candela Krupp

«La idea fija». Ph: Candela Krupp

Y no es la única obra en cartel de su autoría: «Las Vírgenes«, proyecto de graduación de la Licenciatura en Actuación del Departamento de Artes Dramáticas del IUNA (2012).

Así lo describió él: “Las Vírgenes es el resultado de un proceso de investigación entre un coreógrafo y un grupo de actores. El cruce de dos maneras, en mi opinión muy diferentes, de concebir el movimiento y percibir el cuerpo. El desafío fue, desde el principio, crear una obra de movimiento (danza, danza-teatro, teatro físico, no importa el rótulo) encarnada por actores. Una obra cuyo eje central es la poética del movimiento. La palabra no es imprescindible, porque el cuerpo revela el misterio, o al menos, lo sugiere. Son 20 jóvenes actores, llenos de furia y deseo. Cada cuerpo diferente al otro, arrastrando su historia particular, y casi todos libres de las marcas que deja el entrenamiento en la danza. El trabajo sobre el cuerpo presupone disciplina, entrenamiento, repetición y dolor. Es, en cierto modo, un viaje iniciático. Vírgenes fuimos todos y todas, pero la inocencia ya se perdió. Aquí están ellos”.

En la sala Teatrito de la sede French 3614 del Departamento de Artes Dramáticas, todos los sábados hasta el 10 de agosto de 2013, a las 23 horas.

Entradas $50/$40.