Speak 4.1: Hablando con el cuerpo

La experiencia multidisciplinaria de Speak, proyecto integrado por Fabián Kesler, Alejandra Ceriani, Javiera Sáez y Fabricio Costa Alisedo, con Martín Groisman, como invitado, reflexiona sobre las posibilidades de comunicación a través de la mediación tecnológica, con una performance danzada en que el cuerpo es puro lenguaje, con la lengua de señas como inspiración fundamental.

miércoles, 12 de noviembre de 2014 | Por Maria José Lavandera

El patio cerrado de la la Escuela Especial 29 “Dr. Osvaldo Magnasco” se llenaba de cables. Fabián Kesler, con paciencia bastante infinita, organiza un lío de tecnología, para dar sonido al movimiento. El artista Martín Groisman aguarda a un costado, mientras va supervisando algunos ensayos de Alejandra Ceriani y Javiera Sáez, vestidas para la ocasión, una con un pantalón elastizado jaspeado acompañado de una breve remera blanca, y la segunda, con un overall blanco. Ambos vestuarios ofician como espacio privilegiado para absorber las imágenes que Fabricio Costa Alisedo proyecta en una construcción dialógica con el movimiento. Cuenta que usan dos proyectores para trabajar en un pequeño mapping inicial sobre el cuerpo y en la ambientación del espacio escénico. También hacen uso extensivo de «la cámara Kinect, sensando el espacio tridimensional, asi como la configuración de posición de cuerpos y extremidades de los performers en escena. El sonido, por otro lado, es captado por micrófono de aire y traducido en configuraciones visuales en función de las diferentes frecuencias. Se plantea un color para los graves, los medios y los agudos, como principio de la configuración».

Los niños y niñas llegan y se sientan en las sillas y en el piso. Chicos que escuchan y hablan y chicos que no pueden hacerlo. Groisman comenta: “En este proyecto hay una exploración muy profunda sobre cómo se articula el lenguaje con el cuerpo, la codificación de los sentidos, la materialidad del sonido y la potencia del signo. La sordera se presenta como un límite, como una falta, pero también puede ser entendida como la puerta a otras percepciones y formas de comunicación, potentes y emotivas”.

Speak 4.1, en el Colegio Magnasco, en el marco de Proyecto Mañolo. Foto: REVOL.

Speak 4.1, en el Colegio Magnasco, en el marco de Proyecto Mañolo. Foto: REVOL.

Es que Speak se presentó en el marco de Proyecto MAÑOLO, un proyecto de integración e inclusión educativa que se desarrolla en la mencionada escuela desde el año 2010, en el cual, en forma bienal y durante todo un mes, la escuela abre sus puertas y ofrece a la comunidad actividades y talleres inclusivos, reuniendo a chicos, artistas, familiares, amigos y maestros de escuelas comunes y especiales para producir y apreciar arte, jugar, narrar y ver cuentos, teatro en lengua de señas, entre otras actividades. Marcelo Gómez, maestro de plástica y director de la propuesta, explica: “A todos los chicos el arte les permite explorar, descubrir y conocer el mundo por medio de la experiencia estética, esto es a partir de lo sensible y del pensamiento poético. En mi experiencia esto ayuda a los chicos a un desarrollo general más integral sostenido no solamente en la lógica – racional, sino también en sus emociones, intuiciones, subjetividad y en su cuerpo. En el caso particular de los chicos Sordos, su condición natural les hace dificultosa la adquisición y desarrollo del lenguaje. Creo entonces que explorar lenguajes alternativos al verbal es crucial en su desarrollo. El arte los enriquece y les abre el mundo”.

Javiera Sáez, bailando en el Magnasco. Foto: REVOL.

Javiera Sáez, bailando en el Magnasco. Foto: REVOL.

Alejandra Ceriani les baila un abecedario. Esta versión de Speak elabora una lengua de “cuerpo”, emulando la lengua de señas. Una pieza de carácter performático en que las bailarinas, Alejandra y Javiera, van “diciendo” con su cuerpo. Cuerpo que comunica en una proyección, que se mueve a través de una música estridente.

Y los niños y niñas, atentos, dan espacio con su concentración al desarrollo de una obra performática experimental de danza, en una escuela dedicada a la población infantil hipoacúsica. Javiera y Alejandra, con estilos de movimiento diferentes –el de Ceriani mucho más cercano a una estrategia marcial, el de Javiera, un hip hop atractivo, pegadizo, elaborado- van hipnotizando al público. Como indica Javiera: “Fue en ese proceso de investigación y valoración de las manos como instrumentos capaces de trasmitir conceptos, que encontré un estilo de baile urbano que se llama finger tutting y también varios estilos orientales que basan la expresividad del baile en configuraciones y formas echas con las manos, y partí de estos para un código propio en escena. Luego te conectas con la música y la imagen y los movimientos surgen naturalmente. Partimos de la base de que existen un montón de códigos comunicativos asociados a las manos y que incluso hablando permanentemente se refuerzan ideas con gestos manuales, y en ese siento vimos la lengua de señas no como una limitante sino como una extensión en los modos comunicativos posibles”.

Un lenguaje emerge entre ellas. La potencia significante del cuerpo, ampliada, envuelve la experiencia de interacción e intervención. Como indica Javiera: “Los medios tecnológicos suman un nuevo nivel de expresión y lenguaje al trabajo creativo. Funcionan como un nuevo agente dentro de una propuesta escénica. De esa manera la imagen digital posibilita el diálogo con el cuerpo en un proceso de acción y reacción entre lo que el cuerpo dispara y la interpretación que se genera desde la imagen. En esa dinámica se ponen en relación aspectos que van desde lo que captan los sensores y su consecuente respuesta en tiempo real, pero también se propone un diálogo entre los intérpretes humanos en escena y el intérprete humano que propone la puesta visual y sus mecanismos de expresión”. Suma Fabricio: “La idea es incorporar, hacer parte del cuerpo, elementos externos a nuestra naturaleza, buscando siempre entender las tecnologías como herramientas que extienden nuestra visión, nuestros sentidos y sobretodo nuestra lengua”.

Construyendo lenguaje, en proyección. Foto: REVOL.

Construyendo lenguaje, en proyección. Foto: REVOL.

Speak no sólo se presentó en el Colegio Magnasco, sino también, hasta el pasado sábado 9 de noviembre, en la Confederación Argentina de Sordomudos. Fabricio Costa Alisedo tiene gran responsabilidad en el desarrollo de esta tendencia de Speak a trabajar con la lengua de señas y la gestualidad del cuerpo como material comunicativo y proyectivo: “A medida que incorporamos el sensor de la cámara Kinect [perceptora de los movimientos], fuimos profundizando en las posibilidades de sensado del cuerpo y luego de varios meses de investigación ya empezamos a sensar gestos propiamente dichos. En lo personal, la lengua de señas siempre estuvo presente en mi formación desde chico ya que mi madre, la Dra. Graciela Alisedo, se especializó en el estudio de la lengua de señas. Esto me permitió tener contacto con la comunidad hipoacúsica y bilingüe a partir de su escuela, CIBES. No es extraño entonces que desde el inicio de Speak en su relación con Moldeo, siempre haya estado la idea de explorar la posibilidad de comunicar con los medios digitales a través de señas y hoy esta idea tomó forma”.

Fabricio explica que Speak, en tanto laboratorio de investigación, explora nuevas maneras de construir comunicación a través de la intersección de diversas posibilidades tecnológicas: “La comunicación, que es también transmisión de la información, se da en varias capas algunas más conscientes que otras. Si el cuerpo sigue a la música puede hacerlo de forma a traducir el ritmo de la música al ritmo del movimiento del cuerpo, pero a partir del momento en que un sensor toma ese movimiento y el performer visual ambienta el espacio con imagen y color, el sistema empieza a cerrarse como un ecosistema, los cuerpos son inducidos por los diferentes elementos expresados en este ambiente, y en la improvisación se amplía esta exploración”.

Bailando con los chicos en el Magnasco. Foto: REVOL.

Bailando con los chicos en el Magnasco. Foto: REVOL.

Trabajan el concepto de “instrumento humano”, cuya expresividad va develando en tiempo real sus posibilidades de comunicación a través de una danza creada en el momento de la performance: “Improvisar es saber escuchar, ver, e incorporar los elementos de este nuevo ambiente, de forma a expresarlos con la particularidad de la visión de cada performer. Esta forma nos da a cada uno la posibilidad de aportar libremente y así descubrir características comunicacionales inéditas e interesantes. El performer ahora cuenta con un código gestual para desactivar elementos de la escena y activar otros. Hablamos de gesto y no de seña ya que aún no podemos sensar las sutilezas de las manos. Sumado a lo gestual el sonido es táctil ya que puede ser experimentado gracias a las vibraciones captadas por el cuerpo”.

Su intención es lograr integrar esta propuesta a diversos espacios, con la perspectiva de darles un ámbito de acción y reflexión sobre las propias posibilidades expresivas: “Esperamos acercar esta propuesta a las escuelas pensando en justamente generar cierto impacto en los chicos que quieran explorar por su cuenta las posibilidades que les presentamos, con la idea de acercarles alternativas a aquello que comúnmente no tienen acceso. Esto sea quizás el principio de desarrollar obras para todo público que incluyan no sólo a la comunidad hipoacúsica sino a todas las comunidades sin distinciones. Ya estamos trabajando en este concepto”.

Es que la tecnología es parte ya indiscutible de la ampliación de las posibilidades comunicativas actuales, sea cual sea la condición física de cada quien. Concluye Javiera: “Las tecnologías actuales nos permiten flexibilizar al extremos las posibilidades expresivas de la mente y el cuerpo, diluyendo las fronteras entre máquina y cuerpo. Speak 4.1 Ecolecto demuestra que haciendo uso de los nuevos medios, puedes integrarte a los procesos creativos, independientemente de tus capacidades motrices o fisiológicas”.

Integrantes de Speak, en el CAS. Foto: Gonzalo González Maturana.

Integrantes de Speak, en el CAS. Foto: Gonzalo González Maturana.

Cuándo y Dónde

Sábado 15 de noviembre, a las 17 – CAS | Confederación Argentina de Sordos (Yerbal 176, CABA)