“Videodanza Argentino”: 20 años de un cruce

El próximo 10 de noviembre se presentará el documental «Videodanza Argentino», una producción fílmica de 30 minutos que recorre los recientes comienzos de una disciplina que recorre un vasto campo entre la danza y la filmación.

jueves, 06 de noviembre de 2014 | Por Maria José Lavandera

El 7 de agosto de 2013, el Centro Cultural Haroldo Conti se vestía elegante. Es que allí se realizaría una mesa conmemorativa por “Los veinte años del videodanza en la Argentina”, que se ofreció en el marco III Congreso Internacional Artes en Cruce. O más bien, se festejaba de alguna manera el vigésimo aniversario del Primer Taller de Videodanza para Coreógrafos, organizado en 1993 por la Secretaría de Cultura Nación y dictado por Jorge Coscia en la sede de la Biblioteca Nacional, taller que dio origen a este “cruce” en nuestro país entre la danza y el video. En aquel entonces participó la Coordinadora del Área Danza de la Secretaría de Cultura Nación, Mariela Queraltó, y las participantes de aquel primer taller, Silvina Szperling, Margarita Bali y Melanie Alfie. Fue en aquel momento que se proyectó un work in progress del documental «Videodanza Argentino», elaborado por los realizadores Alejandra Ceriani, Daniela Muttis, Osvaldo Ponce y Claudia Margarita Sánchez.

Y es que lo que solía ser un trabajo en vías de realización está ahora terminado. Y el documental “Videodanza argentino” está ahora terminado y concluyó como una película de 30 minutos que se estrenará el próximo 10 de noviembre de 2014 a las 19 horas, en el Estudio de Danza de Margarita Bali, en Zabala 3040 (CABA), con entrada libre y gratuita.

Para sus realizadoras, Ceriani y Sánchez, este proyecto fue poner en valor y reflexionar sobre la trayectoria de esta suerte de especialización a mitad de camino entre la danza y el cine en nuestro país: “Primero surgió la idea de la mesa, para la cual la convoco a Alejandra. Académicamente hay pocos espacios en Argentina para que el videodanza pueda pensarse, reflexionarse a nivel universitario. Que hubiera una mesa académica, conmemorando del Primer Taller de Videodanza, que lo dio Jorge Coscia en el año 1993, era ya un acontecimiento. La idea era convocar a las cuatro realizadoras que presentaron los primeros cuatro videodanza argentinos; también referentes teóricos, para generar pensamiento y reflexión teórica. Por eso fue invitada Graciela Taquini, que es madrina del festival [Festival Internacional de VideodanzaBA], Rodrigo Alonso [curador independiente, especialista en nuevos medios]. A dos meses de realizar este evento, nos dijimos qué bueno sería contar también con material audiovisual de aquel proceso originario”, comenta Claudia.

Alejandra agrega: “En esa mesa surge la necesidad de generar una memoria. No hay historicidad para este tipo de producto. No hay un espacio donde el investigador pueda ir a indagar. Hay muchas ideas reiteradas y es porque los nuevos realizadores no saben que ya alguien lo hizo. Tampoco está online. Teníamos varias ideas: desde armar una plataforma, hasta sacar un libro o configurar un programa de televisión. Empezaron a salir ideas. En un momento le planteo al Secretario la idea de tener una línea de financiación. El plantea hacer un concurso con el CePIA [Centro de Producción e Investigación Audiovisual], junto con un espacio de capacitación. La verdad que esta mesa incluso ayudó a potenciar el área. Vimos que una instancia académica y de gestión puede incidir en la política pública. Tuvo una consecuencia más allá de lo que nos hubiéramos imaginado. Y finalmente la mesa por los 20 años tuvo mucha convocatoria. Fue una experiencia muy importante, porque el Secretario de Cultura, Coscia, se dio cuenta de la importancia de lo que se había generado a partir de ese taller y del festival. La existencia del festival hizo que ese taller perdurara en el tiempo y generara este abanico de gente, que somos alumnos y subsidiarios de este festival. Me imagino que lo habrá conmovido. Es muy importante haber sido el originario de un espacio artístico contemporáneo en Argentina”.

Videodanza argentino

 

 

 

En relación a aquel primer taller, que tenía cerca de 30 personas, sólo salieron cuatro obras, cuyas autoras fueron las representadas en el documental: Melanie Alfie, Silvina Szperling, Margarita Bali y Paula De Luque. Sánchez relata también que hubo un Primer Festival de Videodanza en 1992, que se realizó con subsidio del Fondo Nacional de las Artes, pero entienden que no contó con hubo mucha producción local, lo cual motivó que el año siguiente se hiciera el mentado taller.

Y el videodanza así logró una continuidad de veinte años en Argentina y expansión creativa a través de diversas provincias y de distintas disciplinas: “Es un arte fronterizo, no solamente porque es un híbrido, sino porque es fronterizo del campo artístico. Estamos en la periferia. No es danza y tampoco es puramente cine. No soy bailarina, así que tengo más la mirada en lo audiovisual, y ella, desde la danza”, comenta Claudia, en relación a su colega Alejandra.

¿Qué es el videodanza? “Videodanza es la construcción de una coreografía que sólo vive cuando está encarnada en un video, film o tecnologías digitales. Ni la danza ni los medios para manifestarla están al servicio uno de otro, sino que son compañeros o colaboradores en la creación de una forma híbrida». Esta es la definición que plantea Douglas Rosenberg, referente en la materia y actualmente director del International Screendance Festival que cumple este 2014 16 años y se encuentra dentro del marco del legendario American Dance Festival.

Género o estilo. “No consideramos que sea un género. Algunos consideran que sí, porque es un subgénero del videoarte. Pero para mí es un lenguaje. Un modo de hacer. Tiene entradas de lo más absolutamente variables, que son difíciles de clasificar depende desde qué perspectiva lo hagas. Es cómo se vincula el cuerpo con el dispositivo. Si pensás el videodanza como la posibilidad de hacer una narración con un guión, como una historia danzada, es otra forma. Es interesante”, comenta Claudia.

¿Cinedanza? Las posibilidades estéticas actuales se ven potenciadas por las posibilidades tecnológicas. Alejandra Ceriani, por ejemplo, hoy trabaja en la intersección entre cuerpo y nuevas tecnologías en la producción de experiencias estéticas. Pero su camino en la experimentación con el movimiento filmado se remonta a 2005, cuando comenzó una investigación con webcam, “un registro del cuerpo en que uno hace una edición coreografiada, en relación al cuerpo digitalizado. Toda la investigación estética que podía hacer de esa limitación absoluta, desde lo tecnológico hasta el movimiento del cuerpo que podías hacer, que eran micromovimientos. Hoy el videodanza cuenta con un nivel de producción importante. Cada vez tiende más al cinedanza en las últimas producciones. Es un recorrido que ya se hizo en Europa y Estados Unidos, y ahora está llegando acá, porque realmente hay otras posibilidades de producción y acceso. Esa es mi visión del cambio del videodanza actual”.

Claudia completa con una inquietud al respecto de este desarrollo: “Veo que las producciones vienen de la mano más del cine. La puesta sigue siendo danza para la cámara pero es una cámara cinematográfica, que casi no se mueve. La imagen queda súper cuidada y hay movimiento pero no es el movimiento de la cámara interviniendo en la escena. En este sentido, yo trabajo el concepto de la cámara corporizada. No hay espacio de reflexión respecto de la cámara. Están trabajando más desde un concepto cinematográfica audiovisual y hay algo que se está perdiendo en relación al movimiento con la cámara en el cuerpo”.

Videodanza no implica, entonces, una instancia de registro de una obra, sino que una construcción del movimiento para ser exclusivamente filmado: “Cuando aparece la accesibilidad que da la tecnología, hubo un momento en que se perdió el rigor. Todo trabajo tiene que tener algo que lo sostenga, aunque sea pura abstracción. Creo que un buen videodanza pasa más porque tengas algo para contar, para denunciar, para pensar. En este sentido, descubrí hace muy poquito que no doy talleres de videodanza, sino que doy talleres de proceso creativo. Es justamente eso: enseño la posibilidad de jugar con los materiales. Hoy entrás a Youtube y encontrás tutoriales que te enseñan lo técnico. Falta lo otro: la reflexión. Yo este año fui jurado del festival y hay mucho material grandilocuente sin arraigo. Lugares maravillosos y tomas geniales, pero sin temática. La tecnología te tiene que servir en función de lo que quieras decir. No al revés. Y la especificidad del videodanza tiene que ver con lo kinético. Tiene su poética, no necesita justificar nada, tiene una poesía en sí misma, hasta en los trabajos más experimentales”, asegura Claudia.

En parte, tienen la esperanza de que este documental sea un puntapié inicial en la construcción de una historicidad acerca del videodanza argentino: “Es una deuda trabajar algunas reflexiones sobre qué fue en estos 20 años. Ahora hay una conciencia enorme del dispositivo tecnológico. En algún punto, plantear una historicidad es una deuda para que se realicen trabajos novedosos. Gracias a esa mesa que sucedió, se pudo poner los ojos sobre eso, entender los lugares del videodanza, sus características, qué espacios abarca en Argentina”.

Claudia concluye con otra cuenta pendiente: “Es un campo muy grande y nos falta conformarnos como campo. Nos aglutina el festival, pero este año no está, y estamos ‘sueltos’. Pero todo cambia muy rápido cuando está en devenir constante. Este año se generaron una serie de capacitaciones por todo el país [en Bariloche, Rawson, NEA y NOA, entre febrero y abril de 2014, a cargo de la otrora Secretaría de Cultura de la Nación], el año que viene esperamos que eso se convierta en producción y que surja con el motor que implica estar impulsado por una entidad oficial, como política pública. El año pasado de eso no estaba ni la perspectiva. Somos pocos los que continuamos igualmente. Para mucha gente es un lugar de paso. Igual pasa con cineastas o con bailarines y coreógrafos. A los que nos interesa ver qué pasa somos muy pocos. Realmente te entusiasma”.

 

Cuándo y Dónde
Avant Premiere:  Lunes 10 de noviembre 2014 a las 19, en «Bali_Zabala. Espacio de Arte y Tecnología» | Zabala 3040 (CABA). Entrada libre y gratuita

Funciones en el Ciclo de Videodanza de Fibras Ópticas, sección de Prodanza en Noviembre Electrónico 2014 | Centro Cultural San Martín (Sarmiento 1551) | Miércoles 19 de noviembre a las 19 y Sábado 22 de noviembre a las 16Entrada libre y gratuita

Ficha técnica

Un documental que propone un recorrido desde el comienzo de la Videodanza en Argentina. A través de los testimonios de sus pioneros se va congregando un relato que tiene múltiples disparadores a otras tramas inimaginables de vincular. Un puzzle donde se revalorizan las pasiones, las decisiones y las  situaciones históricas y renovadas que hicieron posible el desarrollo artístico de la VideoDanza”.
Realizado por realizado por Alejandra Ceriani, Daniela Muttis, Osvaldo Ponce y Claudia Sánchez.
Con la participación de Margarita Bali, Silvina Szperling, Paula de Luque, Melanie Alfie, Graciela Taquini, Rodrigo Alonso, José Luis Castiñeira de Dios, Jorge Coscia, Mariela Queraltó.

El documental tiene una duración de 30 min.
Invita REVyMA Red de Videodanza y Multimedia Argentina. Este documental contó con el subsidio de PRODANZA